Always Smiling

Con la ausencia prevista por la navidad... debo decirles que francamente el sábado a la noche fue el mejor día para salir. No hacía frío, estaba agradable el clima y sobre todo... no llovía. Fue el cumpleaños de una amiga de Camy, y fuimos al querido bardesiempre. Camila fue a cenar, pero yo estuve haciendo fiaca hasta la 1 de la mañana, cuando me digné a ir, elegí la misma ropa que me puse en navidad, pues nadie me había visto esa noche, y además el vestidito gris strapples me quedaba muy bonito -modestia aparte. Llego, busco a Camy, me siento con ella, saludo a los muchachos que la acompañaban, pido un asiento y 3 de ellos se ponen en campaña para conseguirmlo -me sentí una estrella- con una sonrisa dije "qué divinos, gracias" y me senté. Pedí un fernet y me prendí un cigarrillo. Mirando a mi alrededor me di cuenta que amo la joda y no hay caso, no la pienso largar. Cae un mensaje al celu... el rockstar. ¡Apareció como era de suponerse! "Hola naty, estoy yendo a Ramos, vos dónde vas a estar". Mensaje va, mensaje viene, le dije que yo acababa de llegar al bar, que pase a darme un abrazo y siga camino. Lo hizo, y un piquito en la puerta del bar fue otra movida arriesgada: Lautaro y los amigos estaban por llegar. Lo hicieron media hora más tarde, bailamos con ellos, Lautaro me mira mucho, me doy cuenta... creo que le sorprende que después de la fiesta del club yo no haya dado señales de vida, en una de esas lo engaché mirándome embobado, lo miro y le sonrío guiñándole el ojo, se percata de eso y reacciona como quien es descubierto con las manos en la masa, se pone un poco colorado y me devuelve la sonrisa.

Hacía demasiado calor en todos lados, y salimos a tomar aire con Camy, atrás nuestro salen Iñaki, Mario y Lauty, acompañados de dos diecisienteañeras que últimamente se les prenden como chucaco a todos lados. Anuncian que van a un bar en la otra cuadra y nos invitan... mmm no, gracias. Pero el clima en el bar de siempre era insoportable y terminamos yendo... cuando nos ven llegar se escuchan exageradas exclamaciones y gritos de ¡ahora sí! pero nosotras sonrientes, entramos dimos una vuelta y nos volvimos a ir. Camila y las amigas querían ir a bailar, y yo había exagerado con el tamaño de mis tacos, no lo iba a resistir, decidí quedarme. Un conocido me invitó a tomar algo, le dije que no, que me iba a tomar un remis... pero volví al bar de la otra cuadra. Lauty me estaba llamando al handy, y aparecí detrás suyo con un sutil "¿me buscabas?". Me pidio que me sentara al lado de él... y tuve que saltear las piernas de todos para hacerlo -la cara de la diecisienteañera que está atrás de Lautaro... no tenía precio... jajaja pobre, no sabe con quién compite- empecé a recibir los mismos halagos de siempre "diosa" "divina" "reina" "morocha infernal"... me quedé hablando con el hermano de Mario, a quien adoro también porque es un sol -tiene novia- y me contaba que las amigas de su pareja eran unas amargas que nada que ver conmigo, yo les contesto que si uno no le pone onda, no puede esperar que lo hagan los demas... y salta Mario desde un rincón y dice "¡Y mirá lo que es esa sonrisa!" y el hermano le dice a Lauty: "Natalia tiene que ser tu novia" yo con un agraciado "jajaja vade retro" cancelé todo tipo de expectativas al compromiso.

Bueno... hora de irme, pero era temprano todavía: mmm... ¡rockstar! me acordé que me habia mandado un msj contándome que su fiesta estaba aburrida. Lautaro me insinúa que irnos juntos, le dije "puede ser" pero después se puso a joder con los amigos y quien les habla no se iba a poner a esperarlo a que termine de hacerse el payaso... le mandé un msj al rockstar que me venga a buscar para volvernos juntos -es mi vecino- y vino. Cuando lo veo, saludo a todos y digo que "me voy" y Lautaro me pregunta cómo me vuelvo, le dije que me vino a buscar un amigo... (celos indisimulables) y con una sonrisa y un besote a cada uno... me fui. Terminé esa noche haciendo terapia en la sala de ensayo, con deep purple de fondo... y con la seguridad de que nuestra relación rockstar-diva, estaba intacta.

Las apariciones estrella son brillantes, pero hay que hacerlas durar poco. Retirarse en el mejor momento... los desconcierta.

Disfrutando de los 20 años, Naty.