Dilema: ¿es gay... o simplemente no le gusto?

Puede pasar, claro que sí. Sobre gustos no hay nada escrito, y es perfectamente aceptable que no le guste. Pero algo no me cierra.

Ayer tuve el práctico de Historia Social Argentina. Faltó Soledad, así que la clase la dió Lucho. Llegué tarde, como siempre. Entré taconeando inevitablemente, y me ubiqué en segunda fila, en línea recta hacia él. Pensé "esta es mi oportunidad":

• Objetivo: Luciano Dominicci - Docente -
• Situación: Clase de Populismo
• Táctica seleccionada: Juego de miradas.
 

Perfecto, para empezar, busqué durante la hora y media de clase restante, el bendito contacto visual ¡Era imposible! NO ME MIRABA!!!! Tengo ventaja en esa clase, solo hay 3 chicas de mi edad, el resto son hombres o señoras pasando los 40, ¿a quíén mira? ¿mira a alguien? ¿es posible que SOLO se dedique a dar la clase? Sabiendo que tenía clase con él, los lunes me visto un poco más sugestiva que el resto de la semana: jean elastizado, botas altas, musculosa escotada y manguitas largas para darle el toque de holgadez al atuendo. Me había maquillado los ojos con delineador negro, sombra gris topo, rimel y arqueador... la boca suavemente rosa, y a penas algo de rubor para darle color al rostro. Claramente, la fuerza estaba en la mirada... ¿qué pasó?

Cuando faltaba media hora de clase, salió de atrás del escritorio, se ubicó delante, y se sentó sobre el mismo. Estaba más cerca. Intensifiqué mi mirada, y justo cuando estaba explicando la visión de Sidicaro en "Los tres peronismos" ¡ME MIRA! Pero no por más de 20 segundos, y sigue explicando... 

Hora de probar contacto. Me vuelve a mirar, le sonrío, me sonríe. Bingo. Al rato cuando estaba hablando del 17 de octubre, empiezo a prestar mayor atención al discurso y no al sujeto, y sin darme casi cuenta apoyo la lapicera sobre mis labios y la muerdo con las paletas tratando de entender el suceso... ¡me vio! Se aclaró la garganta y lo pesqué ¿entonces qué?

Cuando está terminando la clase, pide las correspondiente reseñas a los textos:

N:-"Esta es la tercera, estoy una reseña atrasada"

L:-"Muuuuuy mal" (retándome en tono de chiste) "Encima vos sos la que me retaba porque no traía las reseñas anteriores corregidas"

N:-"La misma, y decime ¿las trajiste?" (ya lo tuteo)

L:-"No, me las olvido"

N:-"Muuuy mal" (usando el mismo tono que él) "así que no me podés decir nada, chau, hasta la clase que viene" 

Y me fui dando media vuelta y riéndo. No me quedé. Se espera que una mujer interesada en su profesor se quede hasta que se retiren todos los alumnos, espera a quedarse a solas. Yo me fui. Gente, esa es la carta del desconcierto.

Sin embargo, la desconcertada soy yo... pero ya me conocen... ¡adoro los desafíos! Por eso la temporada Lautaro me duró tanto.

PD: No sé si lo desconcerté, no sé si es gay, no sé si solo lo que ocurre es que no le gusto... lo único que espero, es no haberlo ojeado. :S

Saludos, Naty.